Nada
Fue un día normal, con el ajetreo de siempre, con la rapidez de siempre. Y para rematar, no se me ocurre nada para escribir, nada. Ni un sólo tema para hilar. Nada. Estoy sentada frente a la computadora con la mente en blanco. Podría seguir escribiendo sobre mi vacío mental, pero ni para eso aparecen las ideas, vaya ganas de escribir las mías.
Comentarios
Publicar un comentario